Hoy compartimos emociones con Teresa Arias, terapeuta y escritora de “Emonautas”.
¿Qué enseña un cachete?
Salida del colegio, “hora punta” que se diría. Los niños salen con sus mochilas y con un montón de emociones y de experiencias. Y con ganas de jugar, de correr, de saltar… de divertirse y desfogarse. Lo necesitan. En cuestión de minutos, la salida se desaloja. Unos van al parque, otros se quedan en el patio, otros tienen extraescolares… Pero hay una escena que llama la atención:
“El juego permite al niño gestionar su estado emocional”
Vanessa Casals del Centro Moa de Psicomotricidad Relacional y Terapia Infantil, Doctora Cum Laude, especialista en atención temprana, psicomotricista, y ante todo, una persona que entiende el juego en el niño como una necesidad básica.
A mi hija no le gusta cómo es, ¿Cómo le respondo?
-“Mamá, no me gusta cómo soy”.
– Ummm…¿Qué respuesta le doy? Uff…, allá voy… “Cariño, te diré algo. Hay tantas personas que piensan como tú y no lo dicen, como tantas que lo pensaron en su adolescencia, en su infancia o juventud y no fueron capaces de quererse a lo largo de los años. Eres valiente por darte cuenta y fuerte por atreverte a admitirlo y pedir ayuda.
No le hagas llorar, se hará más fuerte
Poner la zancadilla a tu hijo es frustrarle, sí. No dejarle llevar al colegio sus zapatillas favoritas también. Obligarle a llevar un peinado que no le gusta o no dejarle elegir entre pera o manzana también entran en la categoría de frustrar, sí; pero también de fastidiar, al igual que meterle el dedo en el ojo, dejarle sin papel higiénico en el cuarto de baño…, y un sinfín de ideas que se nos podrían ir ocurriendo.
Entrevista a Hilario Blasco Fontecilla:”Los menores con TDAH no estudian no porque no quieran, sino porque no pueden”
Hilario Blasco, investigador, profesor, psiquiatra infantil y Doctor Cum Laude, entre otras cosas, pero ante todo una persona que aporta y que trabaja por el bienestar infantil.
Que lo sepas: Tu hijo va a discutir, enséñale cómo hacerlo (11 pautas)
Discutir y tener un conflicto es emocional por sí solo porque lleva implícito tanto “corazón” y tanto sentimiento, que es inevitable que las emociones afloren y queden en evidencia ante nuestras respuestas.
Cómo ayudar ante un aborto
Aún te siento. Aún te siento conmigo. Aún recuerdo la felicidad tan grande de tenerte, de saber que aún sin tocarte te deseaba tanto. Aún recuerdo el momento en que supe que estabas conmigo, lo especial y privilegiada que me sentía. Recuerdo la cara de tu padre al verme sonreír de felicidad por ti, su abrazo, su emoción. Aún te recuerdo y te recordaré siempre. Recuerdo tantas cosas buenas de ti, que se que eras y eres mi estrella. Aunque no pudo ser.
Entrevista a la dentista dr.Mónica Martínez: “La salud bucodental puede afectar al estado emocional de los niños”.
Los niños y la visita al dentista: cuándo, cómo y por qué. La odontopediatra Mónica Martínez nos lo cuenta.
Yo NO dejo a mi hijo llorando en el colegio
Mi hijo empieza el colegio por primera vez. El inicio del curso en el cole o la guardería es uno de los momentos delicados para todo niño. “Perder de vista” a mamá o a papá, que son sus personas de referencia seguras y estables, puede dar lugar a un sin fin de emociones en el niño, que pasen por el miedo, la inseguridad, el sentirse vulnerables o incluso el temor al abandono.