Las suegras, esas personas que no eliges pero que son una referencia importante para tus hijos. Que además, tienen la capacidad de facilitar su crianza… y de entorpecerla. En definitiva, que están presentes en nuestras vidas.
Las hay que colaboran con los criterios educativos de los padres, y su presencia se agradece, y las hay que ayudan a su manera. Es decir, que consideran que si les fue bien educando a sus hijos, pretenden aplicar el mismo estilo educativo con sus nietos. No entienden que han pasado unos cuantos años de aquello y que se pueden tener otras formas de educar diferentes a las suyas. Estas últimas, son personas que pueden soltar “perlas” que sientan divinamente como: “no hagas eso que tus padres no te dejan”, “no subas ahí que tus padres te van a reñir”, que no les gusta que sus nietos suban al columpio hasta que no han terminado toda la merienda o que aplican el método de “una cucharadita más” a pesar de que saben que sus padres no son partidarios de forzar en las comidas… Se pueden relatar numerosos ejemplos, y seguro que nos vienen a la cabeza muchos más. En cuanto a la interacción, las hay que son afectuosas y que se relacionan de forma positiva con nuestros hijos, tumbándose incluso en el suelo a jugar con ellos. Y hay quienes tienen una relación más distante o incluso observadora. En cualquier caso, lo importante es cómo afecta esto a nuestros hijos. Lo cierto es, que cuanto más armoniosa sea la relación, más sano va a ser el estado emocional de los niños, pues son muy receptivos y captan todo lo que sucede a su alrededor, tanto a nivel verbal como a través de gestos, miradas y sensaciones. Durante los primeros años de vida, muchos padres tratamos de “reeducar” a nuestros suegros y suegras, pensando que llevar una misma línea de entendimiento entre toda la familia, es lo mejor para nuestros hijos. Y es verdad. Pero conviene saber dónde está el límite de cada persona y tener en cuenta que quienes están por la labor de cooperar, lo van a hacer desde el minuto uno, y con quienes se inicia la relación colaborando a su manera, se podrán acercar posturas pero probablemente no tener una relación tan estrecha. Sin embargo, hay que mirar más allá y no olvidarnos nunca de que nuestros hijos les van a querer, independientemente de cómo sean y sabiendo sus defectos y sus virtudes, porque los abuelos son importantes. Y en el caso de que sepan cuidar, aunque sea a su manera, siempre será más saludable para el niño poder disfrutar de ellos que no hacerlo. Y no os olvidéis que en unos años, las que ahora somos madres… probablemente también seremos suegras. ¿Cómo os lleváis con vuestra suegra? Os animo a dejar vuestros comentarios y desahogos, que ya sabéis que vuestros datos no serán divulgados ?? P.D: Un saludo muy afectuoso a todas las “suegras”
12 comentarios
Hola, estoy hasta los mismísimos de mi suegra, envidio a las que tienen suegras que colaboran, pero la mía es un horror, siempre tiene algo que decir, ahora que si no me coge bien el pecho, que si cuando le doy teta le ahogo, que si como le puedo dar en cualquier sitio porque le doy de pie o andando. Vamos que no sé qué hacer, es bastante z___, con la excusa de que ella crío a 3 sola, le sirve para meterse donde no le llaman, ¿que puedo hacer?
La verdad es que hay casos y situaciones que son complicadas. En cualquier caso, conviene respirar y contar hasta diez antes de responder por impulso. Lo ideal es contestar con educación diciendo que se agradecen los comentarios y consejos pero que estás feliz de cómo estás llevando la maternidad y que de momento lo vas a seguir haciendo así pero que si tienes alguna duda ya recurrirás a ella. Mucha suerte y gracias por tu comentario
Hay que tener santa paciencia con las suegras ya que a nuestras madres les mandamos a pasear por decir finamente y nos perdonan una y otra vez, con las suegras sin embargos no pasa lo mismo ya que no somos sus hijas y la realidad es que la ama siempre es la ama. Yo creo que para llevarte bien con la suegra tenemos que decir si a todo y luego hacer lo que a una mejor le parezca, para ello tienes que estar bien mentalizada antes de verla y hacer una sesión de yoga……. ja ja ja ja
y si las cosas se cogen con buen humor es mejor para todos y sobre todo para nuestros hijos para que no se den cuenta que no puedes aguantar a tu suegra o suegro.
un saludito!!!
Hola Ainara!!
No te falta razón cuando dices que “la ama es la ama”, pues es verdad que la relación que se tiene con las madres no es la misma que se tiene con la suegra. Evidentemente el humor ayuda y me alegro de que lo utilices. Un saludo y gracias por tu comentario
Hola. Pues la verdad es mes difícil porque tengo a mi suegra tooooodos los días en mi casa. A ver si pasa este suplicio y a su hija le da por hacerle abuela y se olvida un poco de mi
Hola Maria!! Es verdad que hay suegras que son muy “participativas” y les encanta venir a casa de una a ver a los nietos. Esta puede ser una de esas ocasiones en las que hay que dejar a los hijos hablar con su madre. Mucha suerte y gracias por tu comentario
ola la suegra al ser la madre de nuestra pareja claro que siempre compartiremos una vida con ellas, a la mia le he tenido mucha paciencia por ser la madre de mi pareja la que no me acepta es ella dice que no le gusta mi forma de vestir,dice que estoy fea, a ninguna nuera acepta, a pesar que ella fue nuera y nunca quizo a su suegra, se expresa muy mal de su suegra a pesar que ya no esta, y por ahí se me hace una falta de respeto hablar mal de alguien que ya no esta, y mas que ella como suegra exige mucho respeto, mi suegra vive en mi casa asi que compartimos muchas cosas, lo que si me gustaría de mi suegra es respeto hacia mi forma de hacer las cosas,ya que siempre esta corrigiendo lo que hago por que dice que ella sabe hacer las cosas mejor, la ropa la tiendo de una forma y ella la tiende de otra forma aunque este tendida de forma correcta,hijos no he tenido aun, y aunque ami no me acepta espero que a sus nietos los quiera mucho.
una saludo y muchas gracias!!!
Hola Elizabeth!!
Gracias por compartir lo que estás viviendo. Es una situación delicada, y más teniendo en cuenta que compartis hogar. No se si has probado a hablar con ella y a comentarle cómo te sientes y cómo te gustaría que fuese vuestra relación o si no lo ves conveniente, pues tu eres la que mejor puede valorarlo. En cualquier caso, te deseo mucha suerte y ojalá que la convivencia mejore. Un saludo
A mi me pasa con mi madre continuamente me está diciendo cómo criar a mis hijos, que si tengo q insistir con la comida, q si ponles tal ropa, q si haz esto o lo otro. Con lo cual discusiones constantes de poca intensidad pero constantes. Me pregunto en q modo afecta esto a mis hijos, procuro evitar esto pero muchas veces es imposible morderme la lengua…upsss
Si, hay personas a las que les cuesta entender que la crianza evoluciona y que cada día se descubren nuevas cosas que nos hacen replantearnos el modo en que tratamos a los niños. Creo que podría ser positivo intentar hablar con ella cuando no estén tus hijos delante para explicarle el modo en el que te gustaría hacer las cosas. En la medida en que lo entienda, le será más fácil respetar tu criterio. Seguro que lo hace con buena intención por lo que es un buen punto de partida. Dile que eche un vistazo al blog, a ver si te ayuda 😉 Un abrazo!!
Hay suegras muy entrometidas,las cosas como son…
Si, tantos tipos de suegras como personas, un abrazo y gracias por tu comentario!!