“Papa, quizás tú no te des cuenta, pero cuando me gritas, se me mueven tanto los cimientos por dentro que siento que algo se rompe dentro de mí.
Respira, pregunta, pero no le dañes
Una escena que viene siendo recurrente en los parques, es esa en la que un niño se tropieza, y su madre le dice aquello de: “¡Pero mira que eres torpe!, ¿no te he dicho mil veces que no subas ahí?, eres un desobediente”. También es frecuente escuchar a dos madres hablar de sus hijos como si estos no estuviesen presentes con frases similares a: “El mío duerme fatal, es nerviosísimo”, mientras la otra habla del suyo en términos como: “A mí me desespera por las mañanas… ¡Es más lento!”.